Buenas noches.
Bueno, la cuestión que planteo y que espero que podáis resolverme es la siguiente:
¿Se puede continuar con una demolición (de la planta superior de un edificio) si aparece una chimenea de fibrocemento (se supone que sin tocarlo) o está totalmente prohibido seguir adelante hasta que se retira el amianto? Yo entiendo que no se puede seguir demoliendo nada hasta retirar la chimenea, acorde al artículo 11 a) del Real Decreto 396/2006, de 31 de marzo, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud aplicables a los trabajos con riesgo de exposición al amianto.
El caso concreto es que en la demolición de la planta superior de un edificio docente apareció el amianto cuando quedaban por demoler todas las columnas y las vigas, y la demolición continuó adelante, utilizando para ello martillos neumáticos y herramientas de corte por disco. Y claro, en cierto momento la estabilidad de la chimenea se vio afectada. Al final la tuvo que quitar un operario normal, no de una RERA, mientras el centro estaba abierto y sin ningún tipo de aislamiento entre la zona en uso y la de la chimenea. La empresa de demolición dice que podía seguir adelante con la demolición si no tocaba el amianto.
¿Qué opináis?
Gracias de antemano.
Bueno, la cuestión que planteo y que espero que podáis resolverme es la siguiente:
¿Se puede continuar con una demolición (de la planta superior de un edificio) si aparece una chimenea de fibrocemento (se supone que sin tocarlo) o está totalmente prohibido seguir adelante hasta que se retira el amianto? Yo entiendo que no se puede seguir demoliendo nada hasta retirar la chimenea, acorde al artículo 11 a) del Real Decreto 396/2006, de 31 de marzo, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud aplicables a los trabajos con riesgo de exposición al amianto.
El caso concreto es que en la demolición de la planta superior de un edificio docente apareció el amianto cuando quedaban por demoler todas las columnas y las vigas, y la demolición continuó adelante, utilizando para ello martillos neumáticos y herramientas de corte por disco. Y claro, en cierto momento la estabilidad de la chimenea se vio afectada. Al final la tuvo que quitar un operario normal, no de una RERA, mientras el centro estaba abierto y sin ningún tipo de aislamiento entre la zona en uso y la de la chimenea. La empresa de demolición dice que podía seguir adelante con la demolición si no tocaba el amianto.
¿Qué opináis?
Gracias de antemano.